domingo, 24 de mayo de 2009

la partida de la escribidora



Corín Tellado, la escribidora asturiana que murió el mes pasado, a sus 82 años de edad, fue probablemente el fenómeno sociocultural más notable que haya experimentado la lengua española desde el Siglo de Oro.

ni Borges ni García Márquez ni Ortega y Gasset ni cualquier otro de los más originales creadores o pensadores de nuestra lengua han llegado a tanta gente ni influido tanto en su manera de sentir, hablar, amar, odiar y entender la vida y las relaciones humanas como María del Socorro Tellado López, apodada Socorrín por su familia y sus amigos, la muchacha que, en 1946, a sus 19 años de edad, escribió en Cádiz su primera novelita, Atrevida apuesta, una arcangélica historia en la que un joven guardiamarina apostaba que conseguiría besar a una chica y ganaba la apuesta gracias a un apagón de la luz en medio de una fiesta. A su muerte, 63 años más tarde, había escrito unas 4.500 novelas más, sin contar los radioteatros, telenovelas, fotonovelas y películas inspiradas en sus obras y hecho célebre el nombre de pluma de Corín Tellado.

su rutina era estricta y laboriosa. Su ama de llaves, una mujer que la acompañaba desde siempre y le resolvía todos los problemas prácticos, la despertaba a las cinco de la madrugada. De inmediato se encerraba en su escritorio, un cuarto claustrofóbico, sin ventanas, atestado de anaqueles con sus novelitas, y allí permanecía 10 horas escribiendo, con una breve pausa a las ocho, para desayunar. Escribía casi sin parar y casi sin corregir. Al salir del escritorio, a media tarde, tenía 50 páginas oleadas y sacramentadas, es decir, la mitad de una novela (de acuerdo a las exigencias de sus editores, sus novelas no debían tener nunca más de 100 páginas).

su absoluta falta de vanidad era portentosa. Decía que la maravillaba siempre pensar que la leía tanta gente y era evidente que lo decía de verdad. Su editor le había hecho creer que tiraba sólo 30.000 ejemplares de cada una de sus novelas y, aunque ella sabía que probablemente aquella cifra estaba por debajo de la realidad, no le importaba. Si los editores le hacían las cuentas del tío, se encogía de hombros.

ella no podía sospecharlo, pero fue probablemente la última escribidora popular, en el sentido más cabal de la palabra, la que llevó una variante (fácil, elemental, sensiblera y truculenta, ya lo sé) de la literatura al vasto pueblo, ese que no entra jamás en las librerías y pasa como sobre ascuas por las secciones culturales de las revistas, y piensa que la literatura seria es larga y soporífera. Es probable que con Corín Tellado desaparezca en nuestra lengua la literatura digna de ese calificativo: popular. Lo que queda ya no lo es y lo será cada día menos, a medida que las pantallas vayan exterminando a los libros, o empujándolos a la catatumba.

amiga Socorrín, descansa en paz.

(Mario Vargas Llosa, El País, 17-05-2009)

ronronea:
claudia

8 maullidos:

Ico dijo...

Después de los tebeos pasé a Emilio Salgari y los cinco, luego vino Corin Tellado... me habré leído cientos de novelas que intercabiábamos las amigas y en la tienda por otras...
Corin Tellado cuánto sensiblería y amor romántico metió en nuestras cabezas adolescentes¡¡ y cuántos roles masculino-femenino¡¡¡y cuánto mujer sumisa débil y hombre protector y fuerte¡¡.. ja..ja todo un icono.

Marcela dijo...

una vez tuve la ocasión de coincidir con ella en una mesa redonda (que no en una cama, ajajja) y me pareció una mujer adorable y realmente humilde, muy trabajadora. No fue romperdora en muchos aspectos pero ella comentó que siempre intentaba que las mujeres en sus novelas hicieran algo que no hacían normalmente: fumar, conducir, tener una profesión, ...

Raúl dijo...

Me ha caido bien esta Corin Tellado. El caso es que no he leido nada suyo, aunque me sonaba su nombre, como los de muchos buenos escritores que no he leído, y digo 'buenos' aún sabiendo por lo que decís cómo era su literatura, en consonancia con el sentido de esta entrada. ¿Por qué le ocultaban las ventas? ¿Por el dinero? ¿Y eso? Jue.

He vuelto a abrir el blog, aunque aún está en construcción, sin título, y con una sóla entrada que acabo de escribir ahora, la dirección es la misma:
http://exegesistomista.blogspot.com/

claudia dijo...

hola ico;
podemos encontrar mujeres sumisas y débiles y hombres protectores y fuertes en toda la literatura clásica.. y lo que es más curioso, también en la contemporánea

besos,

claudia dijo...

hola marcela;
¡qué mujer más peculiar! ¿hubiese sido una escritora «seria» en caso de darse las condiciones para ello? y de ser así, ¿cuánta gente no la hubiese leído?

besos,

claudia dijo...

hola julián;
no sé si era una escritora «seria», pero al parecer trabajadora y entregada a su profesión lo era un rato..

por cierto, las gatitas estamos apostando sobre cuánto tiempo vas a ser capaz de aguantar sin sexo, ni drogas, ni rock'n roll :)

besos,

Raúl dijo...

Sin sexo demasiado aguanto ya jaja

claudia dijo...

hola julián;
sobredosis de rock'n roll para compensar ;)

besos,