martes, 27 de enero de 2009

Ricardo I de Inglaterra



apodado «Corazón de León» por su valor durante la Tercera Cruzada, el rey Ricardo I tuvo una vida sexual cuando menos ambigüa.

en las Crónicas de Enrique II (su padre) se menciona la tierna intimidad entre Ricardito y Felipe II de Francia. Tal era su amistad que «comían juntos en la misma mesa y en el mismo plato y ni siquiera los lechos los separaban por la noche. Y el rey de Francia lo amaba como a su propia alma; y se amaban tanto que el rey de Inglaterra estaba sorprendido de la pasión que los unía.»

sí, sí, mucha pasión, pero la fidelidad no debía ser la mejor cualidad de Ricardito.. se le conocen al menos otros dos amantes: el joven caballero Raife de Clermon, a quien llevó consigo a la guerra, y el trovador Blondel, que fue el gran amor de su vida. Según la leyenda, cuando Ricardo fue hecho prisionero en Austria, Blondel le buscó entonando de castillo en castillo una canción que habían compuesto juntos, hasta que finalmente recibió respuesta por parte del rey, desde la ventana de su celda.

Ricardo era un hombre religioso, que pasó su madurez rodeado de clérigos. En confesiones públicas se arrepintió repetidamente del peccatum illud («ese pecado», cuyo nombre no se pronunciaba) pero no parece que se produjera un escándalo especial por ello. A menudo sufría de fuertes crisis causadas por el agotamiento. El diagnóstico de un ermitaño tras una de esas crisis resulta significativo: le aconsejó evitar el pecado de Sodoma y dormir con mujeres. Parece que no siguió el consejo. Se casó, pero murió sin descendencia, y algunos documentos insinúan que el matrimonio careció de validez.

ronronea:
claudia

8 maullidos:

Isabel dijo...

Si es que los hombres, igual dá si son homosexuales o heterosexuales, son promiscuos por naturaleza, y los de sangre azul, parece que mas. Un beso

Raúl dijo...

No sabía este dato de Corazón de León, fíjate qué curioso jeje

La verdad es que del histórico sé poco. Sin embargo de pequeño tenía un largo tebeo donde se contaba su vida como se publicaban antes estas cosas para niños, y yo me lo leía cual Alonsito Quijano con el Amadís de Gaula. Eso sí, en ese tebeo el rey de Francia y Ricardo sólo eran buenos amigos, que se admiraban mutuamente XD

farala dijo...

vaya, qué curioso, gracias por ilustrarme... no tenía ni idea... y lo mejor, jajaja, el título de tu etiqueta "salsa rosa" jajajajaj (histórica, o histérica, podías haber añadido!)

Mina dijo...

ohhhh, no sabía que era homosexual. Bueno, hubo tantos...Se insinuó también que el rey Juan II y su valido Álvaro de Luna también eran amantes, pero no está clara la cosa...
Besitos

Anónimo dijo...

hola isabel;
aichs, los hombres..

besos,

Anónimo dijo...

hola otra vez, julián;
¡me encantan esos tebeos! quizá sean un poco ingenuos, pero los asocio a la inocencia de los años 60-80, cuando los padres creyeron que con educación y esfuerzo sus hijos podrían llegar donde quisieran..

besos,

Anónimo dijo...

hola farala;
sí, es una etiqueta divertida.. viene de una conversación antigua, cuando discutíamos qué tipo de noticias nos interesaría escuchar en los programas de corazón..

besos,

Anónimo dijo...

hola mina;
la relación entre Juan II y Alvaro de Luna fue larga y compleja, y con ciertos tonos enfermizos.. totalmente de acuerdo contigo en que resulta difícil de clasificar

su hijo, Enrique IV, también fue sospechoso de homosexualidad

besos,